Se han planteado entrevistas semiestructuradas con agentes activos de salud del municipio, para dentro el marco del Diagnóstico Comunitario. Un encuentro donde poder valorar, identificar buenas prácticas, apuntar aspectos clave, concretar cuáles son los aspectos a potenciar y recoger propuestas de mejora en ámbitos clave de la salud de las personas.

El proyecto aborda diversos ámbitos clave para el bienestar comunitario, incluyendo la promoción de un entorno alimentario saludable que favorezca hábitos saludables y facilite el acceso a una nutrición adecuada. Asimismo, se fomenta la actividad física, la movilidad activa y el uso de espacios de juego inclusivo para todas las edades, incentivando un estilo de vida más dinámico. También se prioriza la cohesión social mediante el fortalecimiento de redes comunitarias, fundamentales para el sentido de pertenencia y apoyo mutuo. En cuanto a las familias, se trabaja en aspectos relacionados con la crianza y el bienestar emocional, ofreciendo recursos para una mejor educación y salud mental. Finalmente, se enfoca en mejorar la atención primaria y otros servicios públicos, garantizando un acceso equitativo y de calidad para toda la ciudadanía.